RESEÑA: Amor prehistórico
Por Javier Pérez
Desconcertante ejercicio escénico cuyo cariz voyerista alcanza niveles interactivos rayanos en lo psicosomático. Especie de talk show transgresor de sí mismo, trascendiendo cualquier posibilidad de ser sometido a alguna clasificación genérica limitante, Mamut o la prehistoria del sexo, original de Omar Argentino Galván pero presentada en versión libre del dramaturgo Luis Mario Moncada (él mismo “protagonista”) y dirigida por Richard Viqueira y Marco Vieyra, se integra por cinco relatos construidos a partir de la crisis de pareja y la ingenua posibilidad del sexo sin compromiso en una sociedad hipócritamente moralina. El escenario, el pasillo entre las bancas laterales de un trolebús varado en la esquina del Parque México y Sonora de la colonia Condesa (el Trolebús Escénico), parece insuficiente hasta que Moncada (vestido en esmoquin del que se desprende un momento) y Renata Wimer, excepcional en la música en vivo sea con guitarra, voz, palmas (y espalda), acordeón y chelo, se apoderan de la atención del espectador interactuando frenéticamente (una guitarra se hace pedazos, por ejemplo) en el primero de los cinco relatos (se llaman "Vampiro", "Mamut", "Chimpancé", "Cachorros de león" y "Sara locura") acotados explícitamente por Moncada hasta acabar tomados de la mano adentrándose en la oscuridad del parque en un final al que sólo le faltan tres letras cinematográficas apoderándose del campo visual. La obra es poderosa, intensa y certera en su reflexión sobre el hombre sexual y la cosificación que le rodea, convirtiendo el denso trasfondo de sus disertaciones en un divertido tejido escénico que tiene su fuerza precisamente en la ligereza con la que se conducen Moncada y Wimer en sus ejecuciones.
Mamut o la prehistoria del sexo. Trolebús Escénico (Parque México esquina Sonora, Condesa). Vi y sá, 21 h. $100. Hasta el 26 de septiembre. Reservaciones: 04455 38771850.
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